viernes, 25 de octubre de 2019

La gran deposición


Creo que fue Elisa Beni en eldiario.es quien adjetivó la sentencia del Procés como culminación de la “gran cagada”, si no fue así que me disculpe.
Perotodos sabemos que fue sobresueldos Rajoy quien hizo la gran deposición.
Acorralado por el descubrimiento de la corrupción de su partido, al que la Justicia acabó renombrando como una asociación de malhechores, utilizó a Catalunya como un ariete contra el gobierno de Rodríguez Zapatero. 
Comenzó convocando un “referéndum” contra el Estatut, al que acudieron en masa las damas de ropero de la milla dorada de Madrid, para acabar denunciando el Estatut ante un Constitucional, del que valiéndose de las artimañas propias de su grupo, consiguió mayoría conservadora –recordemos a Trillo, el gran enredador de la justicia durante el aznarismo.
La estúpida e irresponsable conducta de Rajoy frente a las demandas del  Parlament  consiguieron  lo impensable diez años atrás: que los partidarios de la independencia de Catalunya fueran mayoría, si no en votos sí en escaños; pero Rajoy siguió a lo suyo, a cobrar y repartir suculentos sobres a los allegados de su partido.
Así pues, el  “efecto Rajoy” hizo que el independentismo catalán se multiplicara por tres entre marzo de 2006 y noviembre de 2012, y que acabara habiendo, por primera vez desde la Transición, un Parlament de mayoría independentista en 2017.
No merece la pena insistir en los detalles de lo ya harto sabido, pero el asunto es que nadie dejó la deposición  de Rajoy quieta, sin tener en cuenta el dicho castellano de que la mierda cuanto más se remueve, peor huele.
Pese a su exigua mayoría, el Parlament decidió proclamar una efímera República –solo duró un minuto, ya que fue inmediatamente suspendida- cuyo fin aparente era que el Gobierno de Madrid se aviniera a negociar.
Entró entonces una feroz Fiscalía, que olía a franquismo puro y duro, que siguió removiendo el maloliente asunto, consiguiendo que el 11 de octubre de 2017, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) notificara a VOX, un  partido extraparlamentario, cuyo único programa es el shit stirring para captar votos del franquismo nostálgico, que admitiera a trámite su querella contra Puigdemont y su Gobierno y contra la mesa del Parlamento autonómico interpuesta el pasado 6 de septiembre y acordara la investigación de los aparentes delitos cometidos por los querellados.
La historia de cómo se han involucrado las altas instituciones de la nación en un asunto simplemente político, lo resume perfectamente el profesor Javier Pérez Royo, en su artículo en diario.es de 22 Octubre, 2019, al que con gran acierto tituló "La subcontratación de la política territorial"
Decía el profesor en el citado artículo que la respuesta al problema de Catalunya “fue subcontratada inicialmente al Tribunal Constitucional y posteriormente, sin que haya desaparecido tal subcontratación, se ha incorporado al Tribunal Supremo a la subcontrata. Y en esas andamos.” .
Quizás olvida el profesor Pérez Royo que hubo otra muy importante institución que se involucró en la deposición: la Corona, con la odiosa arenga del 3-O, desautorizando a los millones de ciudadanos catalanes que habían expresado su voto, cuando muchos esperaban un discurso sereno que apaciguara las tensiones. Díficil con esa actitud pretender ser el Rey de "todos los españoles", ¿o no?
JGM


  


jueves, 29 de agosto de 2019

El horror va quedando atrás



Plácido Domingo regresa a los escenarios tras la ovación de Salzburgo 
Sabido es que el abuso sexual de las mujeres ha sido siempre una práctica social más o menos tolerada, apenas criticada sotto voce.
 “Esa se lo hace con su jefe”
Sí, el director se tiraba a la secretaria, y si había problemas mandaba al marido a una sucursal lejana con o sin aumento de sueldo.
El jefe del súper se lo hacía con las cajeras, que evitaban así los turnos de festivo; y algo semejante sucedía entre los encargados y las reponedoras.
Los cirujanos se acostaban con las enfermeras.
Los pilotos con las azafatas.
Y el director de orquesta con una clarinetista
A Frank Sinatra se la chupaba una groupie antes de salir a escena.
Al presidente de los Estados Unidos se la chupaban las becarias, y guardaban el vestido manchado como un “guardapolvo”
El presidente del FMI se lo hacía con la femme de chambre.
Marilyn Monroe suspiraba feliz cuando acaba un rodaje: “ya no tengo que chupar más pollas hasta la próxima peli”.
En el franquismo se hablaba del abuso continuado de un rijoso productor de cine sobre una niña prodigio que había alcanzado la pubertad, pero  nadie pensó que eso podía ser un delito. De hecho,  hasta el año 2015, el sexo consentido no era delito si la menor tenía ya 13 años.

Se trata, en suma, de una especie de derecho de pernada del superior sobre sus subordinadas. También podía darse el caso entre jefas y currantes o entre individuos del mismo sexo, pero estos casos serían minoritarios.

Viene este post a colación del escándalo surgido recientemente con la conducta del tenor Plácido Domingo.
No le falta cierta razón a Domingo cuando dice que se está juzgando su comportamiento con pautas, con “reglas y valores”, muy distintas a las actuales.
Aunque no  quiere esto decir que su conducta nos parezca disculpable,  creemos que deberíamos separar  la conducta personal con el talento creativo del individuo y, como dice este tenor, tener también en cuenta el contexto social de los hechos:

El presidente George Washington llegó a tener 317 esclavos vivos.
Karl Marx abusó de la criada de la casa, le hizo un hijo, y se lo endilgó al buenazo de Engels.
El novelista francés Louis Ferdinand Céline fue un repelente nazi, pero escribió en 1932 una de las mejores novelas francesas contemporáneas.
 Así mismo,  el compositor Richard Strauss se convirtió en el gran director de los conciertos de la jerarquía nazi, pero seguimos escuchando sus obras sin recordar aquel horror.
Salvador Dalí fue un exegeta de los crímenes franquistas, pero a nadie le cabe la menor duda de que fue uno de los grandes artistas del siglo XX.

Pensamos así, que la ovación que Plácido Domingo recibió hace pocos días en el Festival de Salzburgo no era una apología a su conducta moral, sino simplemente un reconocimiento de sus méritos musicales.

Que el párrafo anterior esté escrito en pretérito no quiere decir que hayamos superado esa lacra social, el cambio social es generalmente un fenómeno de larga duración.
El acoso sexual, el chantaje o la coacción no cesarán fácilmente en los acosadores más comunes, aunque quizá sí habrán de moverse con mayor discreción. El avance de las leyes facilita las denuncias, y el que más y el que menos debería tener en mente la posible reacción de la víctima si las cosas se torcieran.

No nos parece acertado, a pesar de que algunos lo crean, que la humanidad esté sufriendo una degradación moral con respecto al pasado. Se han dado pasos de gigante en la condena de prácticas sociales, cuyo recuerdo, hoy, nos avergüenza y horroriza:
La esclavitud, la tortura, los genocidios, la pena de muerte, eliminada en muchos estados, la segregación racial, etc.

Que el cambio social sea lento no quiere decir que no haya momentos decisivos en la historia.  Fenómenos que se producen de la noche a la mañana repentinos que marquen de forma irreversible el comienzo de una nueva era.
Queremos en  esta entrada rendir un homenaje a las gentes valientes que denunciaron esas conductas odiosas, marcando un hito a partir del cual nada volveía a ser como fue:

El 1 de diciembre de 1955, Rosa Park regresaba de su trabajo en autobús y fue obligada a ceder su asiento a un pasajero blanco, se negó, y ahí empezó la chispa del Movimiento por los Derechos Civiles en los Estados Unidos.  Rosa Parks, en un autobus de Montgomery (Alabama), en 1955.

En septiembre de 1957, los llamados “nueve de Little Rock”, un grupo de estudiantes afroamericanos  fueron a clase el Little Rock Central High School in Little Rock, Arkansas, siendo detenidos por la Guardia nacional A partir de ese suceso, los estudiantes negros alcanzaron los mismo derechos que los demás ciudadanos.

 Y para quedarnos en nuestros días:

Alyssa Milano, consiguió con un tweet acelerar el reguero de pólvora del movimiento #MeToo, a sabiendas del boicot que sufriría por parte de los magnates de Hollywood.
Pero fue Tarana Burke, diez años antes, quien había impulsado una campaña para amparar a las víctimas del acoso sexual bajo la consigna de “Me too”.

Quizá el movimiento más reciente sea Time’s up, fundado el 18 de Enero de 2018  por celebridades de Hollywood en respuesta al efecto Weinstein. Un movimiento que según cifras de Wikipedia, en febrero de 2018 llevaban recaudados 20 millones de dólares para su fondo de defensa legal t había reunido a más de 200 abogadas voluntarias

Con la valentía de todos los denunciantes, nada volverá a ser como fue.

JGM






























































































































































































martes, 2 de julio de 2019

¡Vienen con malos humos!

Madrid se defiende de los malos humos






La reaccionaria medida del nuevo Ayuntamiento de Madrid ha llegado hasta el New York Times.
Su corresponsal Ralph Nader se hace cruces sobre las medidas del nuevo consistorio para aumentar la polución en el centro de Madrid, en contra de todo lo que han conseguido grandes capitales como Londres o Milán.
La  anterior alcadesa, Carmena, se hizo eco de las amenazas de la UE para rebajar las tasas contaminantes de Madrid y evitó las sanciones económicas. Ahora el nuevo alcalde parece dispuesto a revertir la situación y exponer al Ayuntamiento a pagar esas sanciones. Naturalmente serán los vecinos de Madrid quienes las paguen. Quizá a este alcalde, Almeida, le molesete que su antecesora lograra un superavi, disminuyendo  así, la exorbitante deuda dejada por los anteriores alcaldes del PP, Gallardón y Botella.
El corresponsal del NYT se hace eco de las declaraciones del candidato perdedor en las últimas  elecciones municipales, Pepu Hernández, según las cuales la decisión es una muestra de la irracionalidad del vencedor para mostrar su victoria sobre el equipo anterior. Estudios recientes muestran que el riesgo de enfermedades pulmonares o cardiovasculares en ciudades altamente contaminadas es similar al de los fumadores.
Otro disparate del nuevo equipo es resucitar la idea de proponer a Madrid la organización de futuros Juegos Olímpicos, una opción a la que el anterior gobierno municipal del PP había renunciado para siempre tras el frustrante proyecto de Madrid-2020, que costó a los ciudadanos 294 millones de euros, El presupuesto para el nuevo proyecto se estima en 1.670 millones.
¿Se imaginan el desdén con el que los miembros del Comité Olimpico recibirían la candidatura de una ciudad gobernada en comandita por una banda de fascistas, una de cuyas facciones odia a los gais y a los africanos? Presumiblemente, el representante de VOX, cuyo jefe se jacta de gastar pistola, se negaría a felicitar a un velocista negro que hubiera ganado una prueba.