Cinco días después del
atentado de Bruselas, El País seguía
dedicando al suceso su primera página y las cinco siguientes; sin embargo en la
portada de ese mismo ejemplar solamente dedicaba un recuadrito al final
de página al atentando de Pakistán, donde un terrorista se inmoló llevándose por delante
a 72 personas, en su mayoría niños, por tratarse de un parque público, y con más
de 300 heridos graves.
Ya casi dos años atrás,
en diciembre de 2014, los talibanes
habían causado una masacre mayor, haciendo explotar un artefacto en una
escuela, que causó 148 muertos, de los cuales 132 eran niños.
Esto nos recuerda aquella noticia que apareció en un
periódico español de derechas -¡cúal no lo era entonces!- tras un accidente
ferroviario en Torre del Bierzo, en 1944, puede que con más de 800
víctimas: “Afortunadamente todos los muertos eran de tercera clase”.
Según el Diario.es
de 22/Marzo/2016:
“El 87% de los atentados yihadistas desde el año 2000
han sido en países de mayoría musulmana"
"Casi nueve
de cada diez atentados perpetrados por organizaciones terroristas de corte
islamista entre 2000 y 2014 se produjeron en países de mayoría musulmana
Más de
72.000 personas murieron en estos atentados, 63.000 en países donde el
Islam es la religión mayoritaria”.
Es una muestra de cinismo extremo el pánico público que promueven los lobistas
de la seguridad en Europa, alentando todo tipo de reacciones fascistas, recortes
de libertades y todo tipo de negocios para la ”seguridad”, a sabiendas de que los
misiles occidentales y las bombas de ISIS y de otros paranoides desesperados matan
a más inocentes en una semana que los muertos en un año en Europa. Las
atrocidades de Bruselas se ven casi a diario en las calles de Damasco, Alepo,
Karachi o Bagdad.
Según datos de Global Terrorism
Database & Pew Research, solo el 0,1% de los atentados terroristas
tuvieron lugar en Europa Occidental entre 2000 y 2014. Así pues, solo se
cometieron 22 atentados frente a los 15.818 actos terroristas cometidos por
grupos yihadistas en todo el mundo. Unas cifras a los que se unirían los
nuevos ataques este pasado martes en Bruselas, donde han fallecido 30 personas y en
noviembre de 2015 en París, donde murieron 137 personas.
Está claro que para las
democracias de Occidente, ese 0,1% es terrorismo de “baja intensidad”; algo
asumible: los políticos se lucen en los medios, los láseres iluminan la Tour en
París –eso si consideran importante al país atacado, si no, se ahorran el
esfuerzo como cuando los atentados de Madrid-,¡ah! y un funeral lleno de gori
gori, aunque los muertos no sean cristianos,… y a otra cosa.
Nadie quiere hablar de
fuentes de agravio: del penal ilegal de Guantánamo; del gueto de Gaza o de los más próximos
de París o Bruselas;d el robo sistemático de tierra y agua y de la continua
humillación de los israelitas a sus vecinos árabes; o de la condescendencia y la pleitesía
a los príncipes tiránicos feudales saudíes y a sus pequeños vecinos, solo
porque debajo de sus arenas se mueven mares de crudo.
Las respuestas de los
occidentales mueven a la risa; así, el Pentágono o la CIA se jactan de haber
enviado un avioncito autónomo para cargarse al jefe de finanzas del ISIS; como
si la jubilación de un director financiero de un banco de Frankfurt supusiera
la bancarrota de la institución. Todo esto a sabiendas de que, en áreas tan pobladas, probablemente
el dron bombardeara una escuela llena
de niños: ¡Eso sí que es matar moscas a cañonazos!
No menos cachondeo merecen
los cuerpos de seguridad de estos países, donde cada uno va a lo suyo y no
comparten nada ni aún dentro de cada país, véase si no el hermetismo en nuestro
país entre la Policía, la Guardia Civil y los Servicios Secretos. Los
terroristas de París y de Bruselas eran viejos conocidos de las policías europeas
y se mudaban de Turquía a Francia o a Bélgica como Pedro por su casa, paseando
por los parques públicos de Bruselas con un kalashnikov debajo de la chilaba.
JGM
Cierto, es todo hipocresía.
ResponderEliminarMira también como se ha tratado el Ébola en África. Sólo se ha actuado con celeridad cuando era un riesgo de contagio inminente para "Occidente". Han tenido que morir cerca de 20.000 personas para que se actuara.
¿La verdad? Da vergüenza vivir en esta época que se llama "civilizada" y está llena de odio y envidias. No quiero formar parte de ningún bando. Sólo quiero vivir y dejar vivir en PAZ.
Un saludo,
Bernat